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¿Qué es la asertividad y por qué es importante que sea asertivo?

Cristina de Armas 

Cuando trabajo en consulta me gusta explicar que la asertividad es un recurso, una forma de estar en el mundo. 

Pero ¿qué es exactamente ser asertivo?

Una persona asertiva es aquella capaz de expresar sus deseos y opiniones mientras respeta las de los demás. 

Una persona asertiva defiende sus ideas sin negar o minusvalorar las del otro, además se responsabiliza de sus acciones y no cae en la trampa de poner excusas y decir que sí cuando en realidad quiere decir que no. 

La asertividad mejora considerablemente nuestras relaciones con los demás, nos da voz, una voz respetuosa y amable con el otro, nos ayuda a respetarnos y a valorarnos y mejora nuestras relaciones con otras personas tanto en entornos personales como profesionales. 

El terreno de juego predilecto de la asertividad es la comunicación, que suele estar en la base de nuestras relaciones con los demás, pero ¿Qué otros tipos de comunicación existen?

Existen numerosos estilos de comunicación, pero si consideramos que la comunicación asertiva está en el punto medio, la pasividad y la agresividad son dos polos contrarios. 

La comunicación pasiva destaca por estar inhibida en todos los aspectos, las personas pasivas tienden a encontrar muy complicado “decir que no”, “llevar la contraria”, “opinar diferente”. 

Tienden a tomar decisiones teniendo muy en cuenta lo que puedan pensar otras personas, por el miedo a lo que otros puedan opinar. Les cuesta defenderse; sus derechos, sus opiniones, sienten que tienen que complacer a todo el mundo y evitar los conflictos o los posibles desacuerdos. 

 

Lo cierto es que muchas veces lo logran pero generalmente se sienten ignorados, en segundo plano y además todo esto les lleva a que otras personas se aprovechen de ellos. 

En ocasiones las personas pasivas tienen incluso un tono de voz muy bajo e inseguro y les resulta complicado mirar a los ojos. 

La comunicación agresiva destaca por estar sobreactivada, las personas cuyo estilo de comunicación es agresivo tienden a estar en constantes peleas o conflictos incluso suelen tener un tono de voz elevado y brusco.

Las personas con este tipo de comunicación amenazan, abusan de los demás, entienden que los sentimientos y sobre todo mostrarlos son un síntoma de debilidad. 

En la base de su comunicación está el tratar a los demás como si fueran inferiores. 

Es cierto que estas personas no suelen permitir que nadie se aproveche de ellos, pero el poco “respeto” que obtienen y las veces que se salen con la suya tienen un alto coste; la mayoría de personas no quieren tener relación con una persona agresiva. 

Los estilos de comunicación están influidos por muchos factores: aprendizaje de otras figuras (es el estilo predominante en la familia por ejemplo), miedos… 

Pero el factor común siempre es una autoestima baja, que no permite actuar y comunicarse con seguridad, el comunicador pasivo tiene demasiado miedo al rechazo, mientras que el comunicador agresivo tiene demasiado miedo a sentirse inferior. 

Por lo tanto, el trabajo terapéutico centrado en construir una autoestima sana y mejorar nuestra comunicación es clave para reducir el malestar y mejorar nuestras relaciones. 

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