Si hay que sabemos que nos cuesta según vamos creciendo es a decir que no a peticiones de aquellos a los que queremos, nuestros compañeros de trabajo o superiores o figuras de autoridad. Sin embargo, negarnos esta opción reiteradamente también puede contribuir significativamente a empeorar nuestra salud mental. Todo lo que nos negamos se resiste en nosotros y cuando lo adoptamos como rutina nos puede suponer una importante fuente de estrés y ansiedad. Y aunque a veces la teoría está bien y es muy clara, ponerlo en práctica resulta bastante más difícil. Es por esto por lo que en esta semana os proporcionamos unos ejemplos prácticos para incorporar a vuestro vocabulario a la hora de decir que no a alguna petición que sentimos que no va con nosotros, para responder a una crítica malintencionada o para informar de que hemos tomado una decisión contraria a la que alguien esperaba o espera de nosotros.
Estos ejemplos son:
- “Entiendo lo que me dices, sin embargo, mi opinión es…”
Aquí conseguimos de manera asertiva validar la opinión, sentimiento o petición del otro, dejando claro que es una opción válida pero que no es la nuestra. Puede ser muy útil para exigencias injustificadas.
- “Comprendo tu pensamiento, por el contrario, el mío es…”
En este ejemplo podemos observar una variante del anterior en el que también aceptamos como válida la opinión del otro, pero nos mantenemos firmes en la nuestra. Útil en críticas no constructivas.
- “Agradezco tu recomendación, pero finalmente he decidido…”
En esta opción introducimos un cambio, una diferencia entre lo que nos dicen que sería bueno hacer y lo que realmente hemos decidido llevar a cabo. De gran utilidad para vendedores, publicistas o peticiones reiteradas que no son de nuestro interés.
- “Me gustaría poder complacerte, por el contrario, no me siento cómodo/a con ello y he preferido…”
Este prototipo se adecuaría a exigencias muy personales que confrontan nuestros valores, nuestros sentimientos o que nos ponen en un compromiso moral.
Estas serían algunas opciones de las que podéis disponer a la hora de decir que no cuando no queremos y mantenernos firmes en nuestras decisiones. Esperamos que les deis mucho uso y que os ayude a mejorar vuestro discurso en este tipo de situaciones.